El clan Narváez aguarda en Panamá una pelea clave. La protagonizará mañana Néstor, hermano menor del campeón mundial, contra el local Luis "El Nica" Concepción (televisará TyC Sports desde las 23). Ese espíritu de cuerpo que caracteriza a los hermanos Omar, Néstor y Mario Narváez es una de los pilares sobre los que se asienta el equipo. Se trata de una esquina rica en consejos técnicos, pero también en contención humana. Esas corrientes de confianza son imprescindibles porque le brindan al boxeador un punto de apoyo que suele escasear. Néstor Narváez viene de disputar en Japón el título mosca del CMB (en noviembre pasado). Jugó de visitante y Toshiyuki Igarashi le ganó en fallo dividido al cabo de 12 asaltos muy parejos. Por eso el chubutense encontró este desquite con tanta rapidez. Otra vez en rodeo ajeno, Narváez se topará con un rival acostumbrado a pelear en la "Arena Roberto Durán", al calor de su público. La última vez que salió de Panamá, Concepción perdió por nocaut técnico con Hernán Márquez. Fue en México.

Narváez es guapo y físicamente muy sólido. No está a la altura de los exquisitos destellos de calidad de su hermano, pero tiene argumentos para superar este escollo. Hay un título de por medio (el de "plata" del CMB), pero eso es lo de menos. El premio mayor es la chance de volver a combatir por la corona mundial. El ganador de la pelea se medirá con el vencedor del duelo entre el japonés Akira Yaegashi (le arrebató el cetro a Igarashi) y el retador número uno, el mexicano Edgar Sosa. ¿El pronóstico? Difícil, pero con un guiño a favor del argentino: 55 a 45.

A todo esto, ¿qué es de la vida de Omar? "El Huracán" aprovecha para entrenarse mientras acompaña a su hermano. El 24 de agosto defenderá por séptima vez el título supermosca de la OMB, en Chubut y frente a otro nipón, Hiroyuki Hisataka. El monarca deslizó que podría pelear con el panameño "Chemito" Moreno, pero eso implicaría trepar a la categoría gallo. Ya lo intentó una vez y le fue mal (perdió por puntos con el filipino Nonito Donaire en el Madison Square Garden). ¿Y ahora? Mmmm...